lunes, junio 06, 2005

Disparando

Las noches anteriores al mes de fiesta son simples programas restringidos en ocasiones. Sentir labios, besar lágrimas, llorar esperanza... Disparar con escopeta de semirrecorte a los buitres que anidan en el campanario, al chacal oculto tras la charca negra, al felino que se esconde en cualquier parte... Safari de celos y amarguras ocultas tras la falda de la tabernera... Palabras nunca pronunciadas escondida entre las telas naranjas de mi noche color azul de verano... Deseos reprimidos, de billete de ida hacia lo irascible...
Disparar alto es la aventura de cada día, con la seguridad de sólo conseguir pichones. Disparar bajo es falta de autoestima, con la seguridad de conseguir lo que no deseas. Añorar tardes bajo la luna, y noches bajo el sol de otoño asustado por nuestra compostura. Odiar a los gamberros de ciudad ya no es efectivo... tal vez sea momento de despertar.

No hay comentarios: