martes, julio 01, 2008

Felicidad Urgente

En la última noche del invierno de junio, raíces nuevas conquistaron las tierras de las ganas. Navegantes en infinitos mares con olor a limón y billetes de bajada al mundo.

Sonrisas eternas en vestidos lindos atraparon a las estrellas de la visceralidad marchita. Preciada suerte la de los del corazón infinito, que arrojan pasos al vacío en busca de escaleras de esperanza.

Cesó el caos en la mayor de las derrotas. Volaron las espinas de las almas gemelas. Cayeron revoluciones en grata compañía. Bailó el sordo al compás de la música que nunca fue escrita.

Mañana de conquista y rabia viva. Autocariño de ojos cansados. Mordiscos de paz en la luna de julio. Descenso bendito, labio tímido, palabra frágil, soledad amada, felicidad urgente.